viernes, 17 de abril de 2020

Alta Ruta Pirenaica 29º etapa: Del refugio de Oulettes de Gaube al refugio de Wallon.

ARP 29º Etapa: Refugio de Oulettes de Gaube-Collado de los Mulos-Col d'Aratille-Lac d'Aratille-Refugio de Wallon-Marcadau.
(23 de Junio de 2019)

Datos Técnicos: 8 Km, 6 h de marcha con paradas, 600 m de desnivel positivo, aproximadamente. 
Dificultad técnica: Media (Baja sin nieve).
Dureza: Baja.
Agua en abundancia en casi toda la ruta. 

Continuamos con la Alta Ruta Pirenaica (ARP) con una etapa en la que coinciden casi todos los pirineístas, como Gorka López y Georges Véron. No obstante, lo habitual, como ya comenté en la anterior entrada, es hacer esta etapa desde el refugio de Baysellance (estaba lleno y no pudimos pernoctar la jornada anterior), añadiendo 1,5 horas, un par de Km y apenas 100 m de desnivel positivo desde Baysellance a Oulettes de Gaube.  

Nos queda por tanto una etapa más corta, que nos permitió no madrugar demasiado y llegar para la hora de comer al refugio de Wallon-Marcadau. La etapa me trajo gratos recuerdos de cuando la hice en sentido inverso hace 35 años, también con mucha nieve, el lago del col d'Arratille helado y la majestuosa mole del Vignemale desde el valle del Gave d'Arratille y el collado del mismo nombre. Es una etapa fácil, para disfrutarla y saborearla a cada paso. 


Repuestos en el refugio de Oulettes de Gaube de la dura jornada anterior, iniciamos el camino atraídos por la bíblica cara Norte del Vignemale, caminando plácidamente por las praderas de Oulettes de Gaube. El sol empezaba a acariciar las calizas y los esquistos cimeros de la Pique Longue. Tendrá  que esperar todavía un poco, porque todos tenemos ganas de subir, sea por vez primera o para repetir ascensión. Así será una cima aún más deseada. 

Maite y Vicente saliendo del refugio de Oulettes 
de Gaube, a 2151 m de altitud. 

Junto a la entrada una piedra esta labrada con la cara Norte del Vignemale. 

Atravesamos el puente sobre la Gave des Oulettes de Gaube. Por aquí baja
el GR10 hasta la confluencia de este valle con el de Marcadau.  

Pocos lugares tan imponentes encontraremos en los Pirineos. 

De izquierda a derecha Petit Vignemale (3032 m), Punta de Chausenque (3203 m), 
Pitón Carré (3197 m) y Pique Longue (3299 m). Debajo los 
glaciares del Petit Vignemale y de Oulettes. 


Detalle del glaciar de Oulettes. Aún le quedan seracs. 

Bonito ejemplar de marmota alpina (Marmota marmota). 

Fué reintroducida por los franceses con ejemplares de los Alpes, ya que 
se había extinguido en los Pirineos, posiblemente de manera natural.

Tras dejar a nuestro simpático roedor, iniciamos el ascenso a la única dificultad de la jornada, es decir, el ascenso al Collado de los Mulos, que comunica con el valle y el circo del río Ara. No llega a 500 metros de desnivel, bastante acusado, pero que a primera hora de la mañana se hace sin problemas. Desde aquí se puede descender siguiendo el valle del río Ara hasta San Nicolás de Bujaruelo o enlazar con el GR11. 

Superamos primero una tartera, con el camino desdibujado. 
Más adelante se ve perfectamente el sendero.  

Mirando a nuestra izquierda nos despedimos del Vignemale. A la izquierda
la Hourquette d'Ossue, desde donde bajamos en la jornada anterior. 

Ya intuimos el Collado de los Mulos, entre el Pic des Oulettes a la izquierda
 (2759 m) y la Pointe des Frères Couffitte a la derecha (2808 m). 

Ya vemos perfectamente el ancho Collado de los Mulos. Sin duda estos utilísimos 
équidos podrían transitarlo sin problemas, dada su resistencia y equilibrio. 

El último tramo transcurrió por una fácil pala de nieve. 

En el Collado de los Mulos (2594 m), con un grupo de irlandeses. 

Estuvimos un rato en el Collado de los Mulos departiendo con un grupo de simpáticos irlandeses que se dirigían hacia San Nicolás de Bujaruelo. Las panorámicas son fantásticas y decidimos bajar unos metros para desayunar al resguardo del viento por debajo del collado. El camino hacia el Col d'Arratille pasa por unas inmensas tarteras del circo del Ara, pero encontramos una repisa tapizada por hierba y un cómodo respaldo rocoso, junto a un arroyo, en la que almorzamos estupendamente. Son aquellos momentos de confort de los que guardas un grato recuerdo. 

Panorámica del circo del Ara desde el Collado de los Mulos. Vamos con los detalles. 

Gran Pic d'Arratille (2898 m) y en medio el Col d'Arratille (2526 m). 
En la inmensa tartera del circo del Ara se ve la delgada línea de la ARP. 

A la derecha y ampliando la imagen el Cervino del Marcadau: el Pico 
de la Facha, Gran Facha ó Pico de Bachimaña (3005 m).

Simpáticos estos irlandeses. Parecen más latinos que británicos realmente. 
Quizás sea de lo poco beneficioso del catolicismo. Me ha salido la vena atea. 

Vicente y Maite posando en el Collado de los Mulos.
 
Descendimos unos 100 m camino del Col d'Arratille. 
Enfrente el Pic Alphonse Meillon (2930 m), 
uno de los picos de Chabarrou. 

Aquí se bifurca el camino y los irlandeses bajaron hacia San Nicolás de Bujaruelo, 
siguiendo el valle del río Ara. Al fondo el Barranco de los Batanes, por el que asciende
 el GR11 hasta la collada de Brazato, que comunica con los Baños de Panticosa. 

Un lugar magnífico para almorzar, con las posaderas cómodamente
asentadas (será que tengo un culito algo delicado...), un rocoso 
pero caliente y cómodo respaldo, agua fresca al lado
y buena compañía. ¡Que más se puede pedir!

Una larga travesía sin apenas desnivel nos conduce hasta el Col d'Arratille, con un  breve repecho final. Aunque casi todo es tartera, el paso incesante ha allanado el camino, que se recorre a un buen ritmo. Lo cierto es que en un suspiro nos plantamos en el collado, que tenía muchas ganas de hollar de nuevo. 

Recorriendo el largo, pero bien trazado camino, por la tartera. 

Cada vez tenemos más cerca el collado. Delante nuestro el Gran Pic d'Arratille. 
Pisar estos neveros es casi agradable, para librarnos de las odiosas tarteras. 

Un último repecho, con el camino más desdibujado, nos llevará al collado. 

Llegamos, ya con mejor camino, al Col d'Arratille. 

Vale la pena detenerse unos momentos en el Col d'Arratille, a pesar de que en ese momento soplaba un aire poco amigable. Las vistas hacia la mole del Vignemale, a pesar del contraluz, son magníficas. Pero sobre todo lo son hacia el valle de Marcadau, con bastante nieve y un lago helado a nuestros pies. Igual que cuando pasé por aquí hace 35 años. Espero no tardar tanto en la próxima visita, porque el lugar se lo merece.  

El Vignemale visto desde el Col de l'Arratille. Se ven dos cimas: la Pique
Longue a la izquierda (3299 m) y el Pic du Clot de la Hunt (3291m)
a su derecha. En medio el corredor del Clot de la Hount. 

Panorámica hacia el Norte desde el Col de l'Arratille, 
con el Lac del Col de l'Arratille helado. 

Igual que cuando pasé hace 35 años. Me asaltó una sensación de deja vú

El camino pasa por las palas nevadas por encima del lago helado. Los picos que se ven 
en primer término, de izquierda a derecha son: Pic de Wallon (2647 m), Pouey Laou 
(2754 m), Gerreret (2859 m) y la cara Oeste de los Pics de Chabarrou (2930 m). 

Nos queda ahora un largo descenso, siguiendo el curso de la Gave d'Arratille, ya con el valle de Marcadau al fondo. Transcurre por un buen camino, que se disfruta en cada recodo. Como teníamos tiempo de sobra paramos un rato a descansar y, sobre todo, disfrutar del paisaje justo encima del Lac d'Arratille, gran lago de singular belleza, como vereís enseguida. 

Primera parte del descenso hasta el Lac d'Arratille. 

Mirando atrás el Lac del Col de l'Arratille y encima el Gran Pic d'Arratille. 

A la izquierda el Pic de la Badète d'Arratille (2806 m) y al fondo el Gran Facha. 

Llegamos a la cuenca del Lac d'Arratille. Al fondo el valle de Marcadau y detrás
 diversas cimas que rondan los 2800 m, como el Pic d'Arrouy y el Gran Barbat.

Pasamos un buen rato en esta zona lacustre, con algunos pequeños lagos por encima del Lac d'Arratille. Disfruté especialmente con las curiosas formas de unas rocas, seguramente erosionadas por los glaciares, y con un curioso "delta" formado por el Gave d'Arratille en el lago del mismo nombre. Mientras huroneaba buscando texturas, Maite y Vicente se tumbaron en la confortable hierba. 

Mirando atrás y de izquierda a derecha  Pic Né (2693 m), 
Col de l'Arratille (2526 m) y Gran Pic d'Arratille (2898 m). 

Ya veo texturas, texturas, texturas...






Cariofilada centroeuropea (Geum reptans). 

Cojín de silene musgo ó patacs en catalán (Silene acaulis)

Panorámica del Lac d'Arratille. 

Aquí se aprecia el lago en toda sus anchura y los 
sedimentos arrastrados por la Gave d'Arratille. 

Sedimentos que han formado este auténtico delta, como se aprecia en al imagen. 

Después de este poco merecido descanso en el aspecto físico, pero muy saludable para nuestra mente, rodeamos el lago por la izquierda, para afrontar un descenso brusco de unos 200 m, pero por buen camino, que nos dejará en el fondo del valle del Gave d'Arratille, tributario a su vez del Gave de Marcadau, río y valle principal de la zona. 


Lac d'Arratille. Al fondo, de izquierda a derecha el Gerreret (2859 m), la Brèche 
de Pouey Trénous (2747 m), el Pic Nord de Chabarrou (2925 m)y el Pic Alphonse
 Meillon (2930 m), muy merecida cabecera del circo del Ara por el Sur. 

Mirando atrás de nuevo, como siempre,  desde el lago y de izquierda a derecha  
Tuca Blanca (2759 m), Pic Né (2693 m), Col de l'Arratille (2526 m) 
Gran Pic d'Arratille (2898 m). 

Avanzamos por un terreno de turberas de la cubeta glaciar. 

Panorámica desde la cubeta del valle de la Gave d'Arratille. 
Al fondo el ancho valle de Marcadau. 

 Dejamos atrás este pequeño escalón. Detrás los Pics de Chabarrou. 

Bonita cascada bajo el PIc Nord de Chabarrou y el Pic Alphonse Meillon. 

Maite contemplando el paisaje desde una brecha del camino. 

El camino transita por roquedos, bosques de pino negro y prados. 

Buscando profundidad, con un retorcido tronco de 
pino negro y al fondo la Crète de Péterneille. 

 Ya echaba de menos unas texturas...

Sólo nos queda ya un corto trayecto para llegar hasta el valle de Marcadau, recorrido por el Gave de Marcadau, cruzar el río por un puente y remontar unos metros hacia arriba el valle principal hasta llegar al refugio de Wallon. El camino transcurre por rutilantes prados, llenos de saltarines arroyos, frutos del deshielo. 


Como puede apreciarse, hemos vuelto a las montañas graníticas, 
después de las calizas de Ordesa y el Vignemale. 

La alegría del agua. O al menos es lo que me sugiere a mí. 

Vicente y Maite ya cerca del valle de la Gave de Marcadau. 

Por estas imágenes frecuentemente voy el último. 

 Llegando al refugio de Wallon, que está detrás de los pinos. Sólo se ve el tejado. 
Aquí confluyen 4 valles: Gave des Batans a la izquierda, Gave de Cambalès
 enfrente, detrás la Gave d'Arratille y a la derecha  Gave de Marcadau.  

Cruzando la Gave de Marcadau. Al fondo el Gran Facha. 

Regugio de Wallon-Marcadau. Cutre, pero en un idílico lugar. 

Tuvimos tiempo de sobra para comer en las mesas en la entrada del refugio de Wallon. Como podeís apreciar  se trata de un refugio grande (120 plazas) pero muy viejo, pendiente de remodelación. De hecho parece un refugio del Siglo XIX, como el pirineísta (Éduard Wallon) que le da nombre. Hay habitaciones individuales, de 2 a 4 plazas, como la que nos adjudicaron, pero que están en un lamentable estado de conservación (llenas de humedades, entre otras cosas), pero curiosamente tienen lavamanos y bidet en cada una de ellas, pero que no funcionaban. Sin embargo no hay duchas, ni de agua caliente ni de agua fría. Al preguntárselo al guarda nos sugirió "Le jacuzzi naturel", que obviamente es el río. Le hicimos caso y quedamos limpios de cuerpo, puesto que nuestra alma ya estaba purificada por tan agradable etapa de la ARP. Aproveché que el día aún era joven para pasear por los magníficos bosques de pinos que hay por detrás del refugio, con ejemplares con un porte admirable, que me recordó a los pinares de Soria. 

Los musgos son una avanzadilla que coloniza las rocas, para que plantas llamadas 
"superiores" se asienten luego sobre ellos. La verdad es que no me parecen
unos vegetales nada "inferiores", sino todo lo contrario.  

Senderuelas en castellano, camasecs ó carreretes en catalán 
(Marasmius oreades). Es un excelente comestible, en
tortilla o con carne guisada, el famoso "fricandó". 

Siempre me ha encantado esta aromática pariente del tomillo. Se trata del serpol 
(Thymus serpyllum). Añadida a un humilde arroz hervido, le da una fragancia peculiar.

Los alrededores del refugio estaban plagados de verderones serranos, 
 en catalán llucareta (Carduelis citrinella). Son muy bonitos. 

La misma ave en un entorno más despejado.  

Otro fringílido que rondaba el refugio es el pinzón vulgar ó pinsá comú 
(Fringilla coelebs). En este caso un colorido macho.

Como ya he comentado, por detrás del refugio hay un bosque, sin mancillar por el hacha del hombre (queda más poético que la motosierra...) de pino negro ó pi negre (Pinus uncinata) mezclado con pino silvestre ó pi roig (Pinus sylvestris). El primero ocupa las cotas más elevadas de los Pirineos y otras montañas eruropeas. El segundo se sitúa en un estrato inmediatamente inferior, aunque lógicamente a alturas como las del refugio de Wallon (1865 m) ambas especies conviven, en este caso de una manera maravillosa: ¡Qué placer ver estos grandes e intocados ejemplares de troncos retorcidos y ramas irregularmente dispuestas!

A la izquierda pino silvestre y a la derecha pino negro. En catalán
queda más claro el porqué de su nombre: pi roig y pi negre. 
  




Si hasta los troncos tienen bonitas texturas...

Acabo la narración de la etapa con los magníficos paisajes y la puesta de sol desde un lugar idílico. El refugio estaba bastante vacío y el guarda es bastante simpático. Cenamos bastante bien y dormimos cómodamente en nuestra vetusta habitación. Mañana toca una etapa bastante más larga y dura que la de hoy, con bastante más distancia a recorrer y mucho más desnivel. 

Panorámica desde el refugio de Wallon hacia el Suroeste. A la izquierda el 
valle de la Gave d'Arratille, por donde bajamos,y a la derecha el valle 
de la Gave des Batans. Vamos a detallarla de izquierda a derecha. 

Imagen del "Jacuzzi naturel", en el marco incomparable del Marcadau. 

El altivo Pic de Wallon (2647 m). Encima tiene algo parecido a una figura humana. 

Entre la Tuca Blanca y el Pic Né asoman las cimas de la Pique Longue y el Pic 
del Clot de la Hount. El Col d'Arratille queda a la derecha de la foto.  

Valle de la Gave d'Arratille. Los 3 picos de la derecha son  la Tête d'Hours (2511 m),
Le Chapeau d'Espagne (2588 m) y el Pic de la Badéte d'Arratille (2806 m). 

  Valle de la Gave des Batans. Enfrente el Pla de la Gole. 

De izquierda a derecha Picos de Marcadau (2677 m), Collada de Pecico ó Puerto
de Marcadau (2541 m), Punta Yarret (2765 m), collau de Yarret (2698m), 
Pico de la Facha, Gran Facha o Pico de Bachimaña (3005 m), 
y collado de la Facha (2665 m), próximo destino. 

 Imagen en la que se aprecia el camino de ascenso al collado de la Facha, 
primero por la izquierda y luego en la ladera de la derecha. 

 Valle de la Gave de Cambalès. Conduce a una zona lacustre muy interesante. 

El Vignemale se despide de nosotros. Pronto nos veremos de nuevo. 



Enlace etapa siguiente: del refugio de Wallon al refugio de Respumoso. Pinchar aquí. 

Enlace etapa anterior: de San Nicolás de Bujaruelo al refugio de Oulettes de Gaube. Pinchar aquí.   



Indice de etapas y anexos


Pirineo Oriental























Pirineo Central


















Pirineo Occidental










Apéndices











Entrada Final. 




3 comentarios:

  1. Genial, gracias por transportarnos a la montaña aunque sea de esta forma virtual.

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  2. como te gustan las texturaasssss amigo

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  3. Quina meravella veure tots aquests paisatges ! A més, ara que estem confinats, és un relax immens,tan de bo aquest estiu hi pogués anar. Gràcies Josemi.

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